¡Alabado
sea Jesucristo!
México,
D.F., Marzo 30 del 2015.
Lunes Santo
EXPERIENCIAS, VISITEO Y
PLÁTICAS PARA TODOS.
Muy estimados todos en Cristo Jesús:
No cabe ni la menor duda, El Espíritu Santo está trabajando
siempre, eficazmente y además, de ‘buena gana’, como decíamos en mi rancho; ¡EN
UN DÍA HACE QUE TODOS LOS MISIONEROS PIERDAN EL MIEDO! ¡Es una Bendición de
Dios! Como responsable de un grupo misionero, uno solo tiene que agradecer lo
que el Señor hace con todos sus siervos y hermanos, que somos nosotros.
Quien nunca ha experimentado la Presencia viva del
Espíritu Santo, duda mucho de lo que le decimos respecto de las Divinas Acciones
que el Paráclito realiza; pero quien ha oído acerca de eso y ‘medio lo ha creído’,
cuando se percata por primera vez de que no es él quien está predicando, sino
el Espíritu Santo, experimenta una reacción emocional, espiritual y mística,
que nunca antes había percibido. Y, por supuesto, ante la primera oportunidad
que tiene, quiere transmitir ese evento, quiere compartir ese momento único e
inolvidable de su vida; en el servicio a Cristo Jesús.
En la Megamisión, los responsables de grupos deben
ocuparse de los seres humanos que les han encomendado para misionar; porque de
las almas de ellos ¡es Dios mismo quien las toma a su cuidado personal! Papás,
mamás, jóvenes o señoritas; y hasta los mismísimos chamacos, toman un brío
evangelizador que quiere ser proclamado, escuchado y atendido. Esa fuerza no es de nuestra voluntad, esa es
la verdadera ayuda que nos concede el Espíritu Santo cuando le invocamos; cuando
somos para Cristo lo que debemos ser: sus seguidores.
Si no han ido de Misiones, es muy difícil que
entiendan cabalmente lo que quiero explicarles, participarles y regalarles;
pero si ya han ido a Misionar y acaban de leer esto, y no están en la Megamisión, estoy seguro que se han emocionado
hasta las lágrimas; porque lo verdaderamente bueno, cuando uno no lo tiene, lo
extraña; a veces hasta el llanto. Recen
por nosotros, así Dios nuestro Señor les hará sentir en cuerpo y alma, la
Megamisión que no están haciendo.
Por si no lo sabían, Las Megamisiones de Familia
Misionera iniciaron en Santa María Huexoculco y Miraflores, en el Estado de
México (en 1994); bueno, pues estamos a dos kilómetros de allí y los paisajes, los
olores, los sabores, los sonidos y muchos otros recuerdos, nos llenan el alma
de dicha celestial. Ojalá que a todos los
demás Misioneros les esté yendo tan bien como a nosotros; se lo pido de corazón
a Dios nuestro Señor.
Orar sirve, hagámoslo; oremos por México.
De todos ustedes, con afecto en Cristo.
Antonio Garelli
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Solo por el gusto de proclamar El Evangelio.
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