“Santifícalos con La Verdad.
Tu Palabra es La Verdad.”
Riviera Maya, Q.R.,
México;
Agosto 21
del 2019.
M Í S T I C A
Por: Lilia Garelli
“Tener un lugar a donde ir, se llama Hogar.
y tener
ambas se llama Bendición.”
Papa Francisco
LA FORMACIÓN EDUCATIVA ES
INAGOTABLE (2)
Muy
estimados en Cristo:
Me da mucho gusto estar nuevamente con
ustedes y poder enviarles algunas ideas importantes sobre el tema que he
escogido desarrollar.
Todos los seres humanos vivimos en sociedad,
es una parte importante para el desarrollo de nuestra
personalidad; heredamos un temperamento que a través de las experiencias
personales se va convirtiendo en un carácter particular que nos identifica de
forma única. ¿Qué cualidades y talentos o bien qué debilidades o defectos hemos
descubierto a nivel personal? Sin duda, todo ello lo reflejamos en ese
pequeño núcleo llamado FAMILIA.
Como bien
sabemos LA FAMILIA está compuesta por padre,
madre, hijos e hijas como el núcleo principal, además de
abuelos, tíos, primos, sobrinos, etc.; todos ellos interactuando de
forma personal, única e irrepetible, según su personalidad.
La FAMILIA, es la institución más lastimada
en su esencia desde siempre, bien podríamos pensar desde el pecado
original, bastaría remontarnos un poco al Gén. 3, 4-5; o bien Gén.
4, 6-8.
La desobediencia, la soberbia, la envidia
y la destrucción, están presentes y de ello hay miles de
acontecimientos en la historia de la humanidad. Nuestra naturaleza
caída tiene esa tendencia, por lo que es necesario contrarrestar el
mal con el bien.
La pregunta que nos podemos hacer es fácil,
¿cómo hacer de una familia ¡UN HOGAR!?, bien nos dijo San Juan Pablo II en
sus escritos sobre la familia: “Familia, sé lo
que eres.” “Sé” esa esencia donde de forma natural,
los integrantes se aman verdaderamente. El Papa Francisco nos lo explica
en innumerables escritos y frases sabias como la que enmarca esta cápsula.
Sé ese Hogar, donde:
·
Aprendes que Dios te ama y te amará por siempre.
·
Quieres compartir tus
sueños y anhelos de vida.
·
Te sientes seguro,
bienvenido y aceptado.
·
Te gusta contar tus
experiencias del día y escuchar las de los demás.
·
Buscas ser escuchado
y guiado con consejos sabios que quieren el bien para ti y los demás.
·
Puedes
comentar tus errores y fracasos para recibir consuelo y orientación.
·
Puedes externar toda
la alegría de tus éxitos y ser felicitado.
·
Puedes compartir
historias de tus antepasados y revivirlas.
·
Puedes reír y llorar
ante lo que te llena el corazón.
·
Te
sientes amado, comprendido y
por tanto buscas hacer lo mismo con los que te rodean.
·
Te das cuenta de
todo lo que es tu
Familia y de lo que otros carecen.
·
Aprendes a dar sin
querer recibir nada a cambio.
·
Aprendes
a rezar de día y de noche, dando gracias a Dios porque está siempre cerca de
ti.
Ciertamente este mundo no es perfecto, y quizá
a tu Familia le hace falta procurar muchas de las buenas
acciones mencionadas anteriormente; pero te puedo asegurar que algo
podrás hacer para sumar una más, cada vez que
puedas; mejorando la convivencia entre todos.
¡No te des por vencido!, a pesar de todo lo
que veas, oigas o vivas. Lucha por lograr poco a poco, una a una, las
bendiciones que te propongas, para que puedas vivir la frase que
enmarca esta cápsula y que de forma tan sencilla ha descrito el Papa
Francisco.
¡Tener un HOGAR donde el AMOR
Y LA ARMONÍA sean una BENDICIÓN!
¡ESO ES EVANGELIZAR!
Afectísima en Jesucristo,
Lilia Garelli
Solo por el gusto de proclamar El Evangelio.
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