¡Alabado
sea Jesucristo!
Marzo 26
del 2014.
¡¡Muchas Felicidades
Nena!!
ANIVERSARIO
DE MATRIMONIO
Muy estimados todos en Cristo Jesús:
¡Hoy cumplimos mi
amada Esposa Lilia y yo 37 años de Matrimonio! (más otros cinco de novios, son
42 años ‘el uno para la otra’ o ‘la una para el otro’; da igual); esto sí
que es ‘toda una vida’. Yo no tengo ni la menor duda de que han sido
años de felicidad y grandes bendiciones, porque hasta en los más duros períodos
de ajuste y desajuste, hemos finalizado siempre en ‘santa paz matrimonial’.
Ni mis abuelos, ni
mis padres, ni mis hermanos (por las razones que ustedes gusten y manden), pudieron
cumplir más de 37 años casados. O bien
fallecieron, o se divorciaron, o simplemente se separaron; pero ninguna de esas
parejas duró tanto tiempo en su Vínculo Matrimonial. Si algo pudiera yo desearle de bien a un
amigo, sería: “Que Dios te de una esposa como la que eligió para mí.” Le iría muy bien, sería feliz.
Además, Dios nos
bendijo con salud, prosperidad y amor; y además, por si fuera poco, nos dio dos
hermosísimas hijas, que son lo más bello que me ha sucedido: haber podido
amarlas y educarlas. Ya casadas ambas,
solo deseo que sus matrimonios sean al menos, como el nuestro y lleguen a
festejar 50 ó 100 años de feliz unión.
Toda la Creación de
Dios tiene su razón de ser en el Matrimonio. La vehemencia de las palabras de Yahveh
cuando une a Adán y a Eva, da cuenta de esta importancia: “Y los bendijo Dios y les dijo: sed fecundos y multiplicaos y henchid
la Tierra. . .” (Gen 1, 28). Igualmente,
es en una Boda, feliz Matrimonio de unos amigos de Él, donde Cristo Jesús
inicia sus milagros: La Boda de Caná de Galilea. No, no es casual; es una verdadera
Diosidencia.
Cuando el Padre Manuel
Ignacio Pérez Alonso, S.J. nos casó, hizo mucho énfasis en el Amor; nos leyó
pausada y rítmicamente ‘El Himno al Amor
de San Pablo a los Corintios’ (I Co 13); y repitió en más de una ocasión,
la recomendación del Apóstol de los Gentiles a los Colosenses: “Pero sobre todo vístanse de Amor, que es el
vínculo de la perfecta unión.” (Col 3, 14). . .Y eso hemos hecho mi Esposa
y yo: amarnos; sin importar si al momento somos o no correspondidos; sin tener
en cuenta el dolor o el sacrificio; amarnos por la simple y sencilla razón del
Vínculo Matrimonial, Sacramento del Señor.
¿Me preguntan que si
todo nuestro matrimonio ha sido miel sobre hojuelas?, ¡por supuesto que no!,
¡la vida misma no es solo dulzuras!; pero siempre ha mediado El Amor entre
nosotros. ¿No creen en las Diosidencias?, yo sí; mi Esposa Lilia es una de
ellas; y le estoy muy agradecido a Dios por Su intervención. Hoy, TREINTA Y SIETE AÑOS DESPUÉS, todavía nos
une el Amor: el vínculo de la perfecta unión. ¡¡Felicidades Nena!!
De todos ustedes,
con afecto en Cristo.
Antonio Garelli
De Milagros y Diosidencias.
Solo por el gusto de proclamar El Evangelio.
casi me hace llorar, que bonito y seguro Dios llegaran a muchos años mas. Felicidades
ResponderEliminarUn poquito tarde pero muchas, muchas felicidades
ResponderEliminarV.T.R.!
EliminarMuchas gracias.
Antonio Garelli
Felicidades a ustedes y a nosotros pues Dios también nos bendice por su medio, con su gran testimonio de vida que nos transmite la Buena Nueva!
ResponderEliminar