MÍSTICA - LILIA GARELLI - (GE-13)

“… Señor, quédate con nosotros …”

San Cleofás en Emaús

Riviera Maya, México; Febrero 12 del 2025.

           MÍSTICA

Por: Lilia Garelli

 

“…La Palabra de Dios exhorta a cada creyente para que busque la paz junto con todos (2 Tm 2,22), porque “el fruto de la justicia se siembra en la paz para quienes trabajan por la paz (St 3,18) …”

Papa Francisco - Gaudete et Exsultate No. 88

GAUDETE ET EXSULTATE (13)

Alegraos y Regocijaos

“Sobre el llamado a la Santidad en el mundo actual”  

Estimados en Cristo:

Seguimos con la bienaventuranza “Felices los de corazón limpio, porque ellos verán a Dios” en donde el Papa Francisco nos dice: “…Es cierto que no hay amor sin obras de amor, pero esta bienaventuranza nos recuerda que el Señor espera una entrega al hermano que brote del corazón, ya que “si repartiera todos mis bienes entre los necesitados; si entregara mi cuerpo a las llamas, pero no tengo amor, de nada me serviría” (1Co 13,3) …” (PF – GE No. 85).

En efecto, de nada sirve el decir que tengo buenas intenciones, si realmente en mi interior hay todo lo contrario; reconocer que solos no podemos superar las miserias humanas nos ayudaría efectivamente para pedir sin pausa a Dios nuestro Señor, nos permita tener un corazón puro de donde no proceda toda la malicia que hay en él, donde realmente luchemos por que no crezcan, ni se hagan efectivas las tentaciones del maligno y nos haga caer en violencia de pensamientos, palabras y obras totalmente equivocadas.

Para terminar este apartado, el Papa Francisco nos recuerda las palabras de San Pablo en el himno de la caridad: “…ahora vemos como en un espejo, confusamente, pero en la medida que reine la verdad del amor, nos volveremos capaces de cara a cara (1 Co 13,12) (PF – GE No. 86).

Mantener el corazón limpio de todo lo que mancha el amor,

 esto es Santidad. 

·        “Felices los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios:

En este apartado el Papa Francisco nos ayuda a reflexionar qué difícil es hoy en día mantener la paz hasta en los círculos sociales más pequeños, en donde la maledicencia se esparce como cáncer, poco a poco, levantando falsos testimonios, transmitiendo aquello que oí o bien “entendí” de ciertos comentarios que se hicieron a la ligera e inclusive se confundieron, añadiendo información falsa y dándola por cierta; esto es el mal que se ha añadido a nuestra sociedad contemporánea, en donde se ha utilizado en las redes sociales equivocadamente, y se han aprovechado para difamar y destruir la dignidad de las personas. ¡Qué difícil será para aquellos ser llamados “hijos de Dios”!

Por otro lado, el Papa Francisco nos dice: “…Los pacíficos son fuente de paz, construyen paz y amistad social.  A esos que se ocupan de sembrar paz en todas partes, Jesús les hace una promesa hermosa: “Ellos serán llamados hijos de Dios” (Mt 5,9).  Él pedía a los discípulos que cuando llegaran a un lugar dijeran: “Paz a esta casa” (Lc 10,5) (…) Y si en alguna ocasión en nuestra comunidad tenemos dudas acerca de lo que hay que hacer, “procuremos lo que favorece la paz” (Rm 14,19) porque la unidad es superior al conflicto” …” (PF – GE No. 88).

Es un hecho que “ir contra corriente” es muy difícil, la constante en este mundo es seguir quizá el refrán que dice “sálvense quien pueda” pero lo que Dios nos pide es trabajar por la paz, desde el más pequeño círculo social como es la familia, entre padres e hijos; continuar con la familia extensa, como es entre tíos, primos, etc. y todavía más entre vecinos y comunidades enteras, ¡qué mejor! para aquellos que gobiernan en las naciones, buscar la paz construyendo un clima de comprensión y ayuda verdaderas, porque lo que realmente se debe buscar es llegar a soluciones duraderas y bien intencionadas.  Quizá pensar así hoy en día pareciera ser un “tanto inocentes o pobres ilusos”, y nos tildarían ciertamente como “viviendo en nuestro propio sueño irreal”; sin embargo, es necesario reconocer que aquello que San Pablo aconseja en su 2ª. Carta a Timoteo es el camino correcto: “…Vete al alcance de la justicia, de la fe, de la caridad, de la paz, en unión de los que invocan al Señor con corazón puro…”.

El Papa cierra la reflexión de esta tan necesaria Bienaventuranza con estas palabras: “…Se trata de ser artesanos de la paz, porque construir la paz es un arte que requiere serenidad, creatividad, sensibilidad y destreza…” (PF – GE No. 89).

Sembrar paz a nuestro alrededor, esto es Santidad.

·        “Felices los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos”:

En esta bienaventuranza el Papa Francisco nos lleva a la reflexión del texto Evangélico de San Mateo 16, 24-26 que nos dice: “…Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame.  Porque quien quiera salvar su vida, la perderá, pero quien pierda su vida por mí, la encontrará.  Pues ¿de qué le servirá al hombre ganar el mundo entero, si arruina su vida? O ¿qué puede dar el hombre a cambio de su vida? ...”   Dios nuestro Señor nos enseñó a través de principios morales que marcan lo que es bueno, lo que es correcto, pero el mundo ha caído en un caos social en el que ha destruido todo lo que era moralmente correcto, lo ha hecho confuso con tantas mentiras y apariencias, todo lo que tenía valor lo ha desechado y a su vez ha tomado lo que es efímero y no sirve dándole el mayor valor, por ello Jesús nos dice “¿de qué le servirá al hombre ganar el mundo entero, si arruina su vida?”

“…Jesús recuerda cuánta gente es perseguida y ha sido perseguida sencillamente por haber luchado por la justicia, por haber vivido sus compromisos con Dios y con los demás…”

Papa Francisco - Gaudete et Exsultate No. 90

Afectísima en Jesucristo,

Lilia Garelli

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