Alemán Español Español Francés Inglés Inglés Italiano Polaco Portugués Portugués Ruso Chino
DA CLIC EN UNA BANDERA PARA OTRO IDIOMA

martes, 3 de septiembre de 2019

MÍSTICA - LA PAREJA (2)


“Santifícalos con La Verdad.
Tu Palabra es La Verdad.”


Riviera Maya, México; Septiembre 4 del 2019.


M Í S T I C A
Por: Lilia Garelli


“… Es una “puerta estrecha” porque es exigente, el amor es exigente siempre,
 requiere compromiso, es decir, “esfuerzo”, 
la voluntad firme y decisiva para vivir según el Evangelio…”  

(Angelus Papa Francisco
19 agosto 2019).


LA PAREJA (2)

Muy estimados en Cristo:
  
Continuando con LA PAREJA, ya que hay mucho más que compartir, vamos a ahondar en la importancia de la mística en la vida cotidiana del matrimonio; ese hombre y mujer que aprenden a vivir juntos en comunidad “communio personarum” (Juan Pablo II, catequesis sobre el amor humano).

Desde el primer momento en que han decidido unir sus vidas para siempre (en la salud y en la enfermedad…) fruto del verdadero amor que existe entre ellos, se inicia la vida conyugal, un camino lleno de ilusiones metas esperanzadoras, como resultado de un amor verdadero;  sin embargo, no tardarán en darse una serie de acciones y reacciones que no siempre son lo que uno y el otro esperaban, y es natural que, siendo dos personas educadas de diferente manera, puedan presentar diversas formas de ver las cosas, por lo que suelen surgir momentos de fricción, intolerancia, rechazo, etc. resultando como lo más normal en la interacción de una comunidad.  ¿qué hacer para que esas inconveniencias no resulten destructivas?

Ante todo y como base fundamental de la estabilidad de la pareja siempre será el considerar la oración como ese acompañamiento en el que el amor de Dios siempre está presente en nuestras vidas, tan real como las palabras del apóstol Pablo:  “… Por eso doblo mis rodillas ante el Padre, de quien toma nombre toda familia en el cielo y en la tierra, para que os conceda, por la riqueza de su gloria, fortaleceros interiormente, mediante la acción de su Espíritu…” (Ef. 3, 14-16).

Todo momento de crisis que, a través de la cotidianidad puede enfrentar una relación de pareja, sea por crisis existencial, provocada por las diversas etapas de madurez por la que pasa el ser humano;  o bien por la problemática económica, tan conocida en el siglo XX y lo que va del XXI; o quizá vivir en algún momento un problema de salud, etc. podría ser no superable con las propias fuerzas, es por eso necesario considerar el consejo del documento conciliar Gaudium et Spes en el No. 49 cuando habla “Del amor conyugal:  …Para hacer frente con constancia a las obligaciones de esta vocación cristiana se requiere una insigne virtud; por eso los esposos, capaces ya de llevar una vida santa por la gracia, fomentarán la firmeza en el amor, la generosidad de corazón y el espíritu de sacrificio pidiéndolo asiduamente en la oración…”

La mejor forma de superar las debilidades humanas y por tanto los momentos de prueba en el matrimonio, es a través de: (1) la oración y  (2) la acción que nos vence y ayuda a descubrir nuevas formas para seguir adelante:

(1)  San Juan Pablo II nos decía en su Carta a las Familias recordando la oración que se reza en el rito del matrimonio:  “… Infunde sobre ellos (los novios) la gracia del Espíritu Santo, a fin de que, en virtud de tu amor derramado en sus corazones, permanezcan fieles a la alianza conyugal.  Es de esta efusión del Espíritu Santo de donde brota el vigor interior de las familias, así como la fuerza capaz de unirlas en el amor y en la verdad…”

(2) Las acciones que nos podrían ayudar siempre requerirán de esfuerzo, dedicación y más que nada voluntad para vencerse a uno mismo, vertiendo en lo más posible el pensamiento hacia nuestro ser querido:
a.    Ser paciente con el otro,
b.    Ser prudente en el hablar,
c.    Ser amable ante las diferencias de puntos de vista,
d.    Ser sencillo y humilde en las reacciones,
e.    Ser honesto y leal en palabra y obra, buscando el bien del otro,
f.     Alegrarse con sus éxitos,

g.   Ser justo ante las incongruencias,
h.    Aceptar los errores,
i.     Saberse perdonar a sí mismo y perdonar al otro,
j.     Ser fiel de pensamiento y obra,
k.    Motivar al otro a seguir adelante,
l.     Mostrarle diferentes caminos para encontrar la paz interior,
m.  Dejar ir las nimiedades,
n.    Luchar por ser coherente, dando ejemplo

Todas y cada una de las propuestas de acción requerirán de fuerza de voluntad para vencer los propios deseos para descubrir nuevas estrategias que ayuden a superar las problemáticas de la pareja.  Cabe mencionar que el esfuerzo deberá ser de ambas partes.

Recuerden, no están solos, van ¡de la Mano del Señor! por la bendición del Sacramento, y hay muchas herramientas que podrán ayudarles a nivel humano, a través de cursos de orientación familiar, documentos pontificios (cartas, encíclicas, etc.) muy valiosos en los que pueden formarse y crecer en sabiduría.

¡Formarse nos ayuda a EVANGELIZAR BIEN!

Afectísima en Jesucristo,

Lilia Garelli 

También me puedes seguir en:

Solo por el gusto de proclamar El Evangelio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario