¡Alabado sea Jesucristo!
Ciudad de
México, Julio 31 del 2017
In Memoriam R.I.P. – X
Aniversario – MIPA.
“Ad Maiorem Dei
Gloriam”
“Para la Mayor
Gloria de Dios.”
San Ignacio de Loyola
SAN IGNACIO DE LOYOLA,
SANTO PATRONO MUNDIAL DE
LOS EJERCICIOS ESPIRITUALES.
Muy
estimados todos en Cristo Jesús:
Ya existían las más famosas órdenes monacales, conventuales
y religiosas y sin embargo, San Ignacio de Loyola se propuso fundar una que: “. . . sirviera
para la enseñanza a toda la gente, de Jesucristo y del Evangelio; para la Mayor
Gloria de Dios.” Todos sus amigos
cofundadores de la Societá Iesus (Compañía
de Jesús), también fundaron colegios y universidades y enseñaron por todo el
mundo; San Ignacio fundó en Roma la Universidad Gregoriana, especialmente para
instruir a los próximos sacerdotes de la Iglesia Católica.
Los Jesuitas –como les conocemos cotidianamente– fueron los
´maestros’ del Catolicismo, cuando las hordas protestantes vejaban y agredías a
La Iglesia. Fueron ellos los máximos
exponentes del Concilio de Trento y también los principales redactores del
sinnúmero de documentos emitidos por el Concilio, para contrarrestar las
herejías de los protestantes; quienes se habían constituido como saqueadores de
la Fe Católica y Cristiana arengados por el ex monje agustino Lutero.
Y como eran los paladines del Cristianismo, el demonio se
encargó de que fueran objeto de envidias, trampa, rencores y hasta difamaciones
al interior de la Iglesia; pero siempre pudieron sobrevivir, e inclusive
progresar, en medio de las adversidades.
Casi todos los países Cristianos (y algunos que no lo son),
tienen algo que ver en su Historia con la Compañía de Jesús. Hay centenas de biografías de San Ignacio de
Loyola y de los Jesuitas, lean tres, las que ustedes quieran; se van a
sorprender de los contrapuntos y las contradicciones. Contra ellos, eso es normal. Yo les recomiendo estos:
Todos ustedes lo saben bien, yo lo he dicho muchas veces; mi
Catolicidad se la debo a dos Jesuitas: al Padre Manuel Ignacio Pérez Alonso,
Sacerdote Jesuita, mi amado Confesor; y a mi Esposa Lilia, Jesuita por
Devoción, por su imbatible testimonio cristiano; producto de un Catolicismo de
Fe, Esperanza y Amor, como debe ser.
Orar
sirve, oremos por nuestros Pueblos.
De
todos ustedes afectísimo en Cristo
Antonio
Garelli
Nota
Buena: Recuerden que el Blog DMD tiene un Compendio de Órdenes
Religiosas y Fundadores que pueden solicitar en diosidencias@gmail.com
También me puedes seguir en:
Veritelius
de Garlla, Apóstol Gentil
De Milagros y
Diosidencias. Solo por el gusto de
proclamar El Evangelio.
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