“… Señor, quédate con nosotros …”
San
Cleofás en Emaús
Riviera
Maya, México; Marzo 5 del 2025.
MÍSTICA
Por:
Lilia Garelli
“…la misericordia no es solo el obrar del Padre, sino que ella se convierte en el criterio para saber quiénes son realmente sus verdaderos hijos…”
Papa Francisco – Bula Misericordiae Vultus 405
GAUDETE ET EXSULTATE (16)
Alegraos y Regocijaos
“Sobre el llamado a la
Santidad en el mundo actual”
Estimados en Cristo:
MIÉRCOLES DE CENIZA
En este día en que iniciamos la Cuaresma en el Año Jubilar de la Esperanza, deseamos de todo corazón, que estas reflexiones sobre la Exhortación Apostólica “Gaudete et Exsultate” en donde el Papa Francisco nos ha alentado a trabajar con acciones claras y a la vez simples, para procurar en la vida diaria nuestra conversión tanto en nuestros pensamientos, como en nuestras palabras y obras; buscando el camino correcto hacia la santidad que Dios espera de cada uno de nosotros.
· El culto que más le agrada:
Como bien dice el Papa, es posible que podamos confundirnos en el camino correcto de la Voluntad de Dios, donde creemos que, con dar culto a Dios, con la oración y quizá cumpliendo y defendiendo algunos principios de la ética y la moral sea todo lo que tengamos que hacer para vivir como Dios lo espera, pero no es así porque bien claro nos dice la Palabra de Dios “ama al prójimo como a ti mismo”; “…olvidamos que el criterio para evaluar nuestra vida es ante todo lo que hicimos con los demás. La oración es preciosa si alimenta una entrega cotidiana de amor. Nuestro culto agrada a Dios cuando allí llevamos los intentos de vivir con generosidad y cuando dejamos que el don de Dios que recibimos en él se manifieste en la entrega a los hermanos…” (PF – GE No. 104).
De hecho, hay formas para darnos cuenta de que el camino que estamos siguiendo es correcto, el Papa nos lo hace notar al ver que nuestra forma de ser se va transformando de ansiedad a paciencia; de actitudes violentas a comprensión ante los obstáculos; de irascibilidad que transmite inquietud a los demás, a actitudes que transmiten paz y deseos de volver a intentarlo. El Papa nos recuerda sus escritos en dos Exhortaciones Apostólicas anteriores: “…ante todo tenemos que decir que la misericordia es la plenitud de la justicia y la manifestación más luminosa de la verdad de Dios. Ella es la “llave del cielo” … (Exhort. Amoris Laetitia – Exhort. Ap. Evangelii Gaudium) …” (PF – GE No. 105).
El Papa continúa recordando parte del análisis que hacía santo Tomás de Aquino en su importante obra la “Summa Theologiae” en cuanto al tema de lo que más le agrada a Dios de nuestras acciones, diciendo: “No adoramos a Dios con sacrificios y dones exteriores por él mismo, sino por nosotros y por el prójimo. Él no necesita nuestros sacrificios, pero quiere que se los ofrezcamos por nuestra devoción y para la utilidad del prójimo. Por eso, la misericordia, que socorre los defectos ajenos, es el sacrificio que más le agrada, ya que causa más de cerca la utilidad del prójimo…”
En efecto, lo que Dios nos pide momento a momento es el tener en nuestra vida la prioridad de agradarle a Él a través de nuestra entrega diaria, en aquello que nos toca hacer de acuerdo a nuestro estado de vida, buscando que lo que aportemos a nuestra sociedad, a cada persona que encontramos en nuestro camino sea la generosidad en aquello que realmente necesiten; ese desgastarnos cada día dando nuestro tiempo, saberes y entrega personal agradará realmente a Dios. Como bien dice el Papa Francisco, ese intento de vivir las obras de misericordia fue bien entendida por la Santa Teresa de Calcuta quien decía: “…Sí, tengo muchas debilidades humanas, muchas miserias humanas… Pero Él baja y nos usa, a usted y a mí, para ser su amor y su compasión en el mundo, a pesar de nuestros pecados, a pesar de nuestras miserias y defectos. Él depende de nosotros para amar al mundo y demostrarle lo mucho que lo ama. Si nos ocupamos demasiado de nosotros mismos, no nos quedará tiempo para los demás…” (Cristo en los pobres, Madrid 1981, 37-38) …” (PF – GE No. 197).
El Papa Francisco continúa haciéndonos notar el daño que ocasiona el consumismo hedonista que sin duda nos enajena en el culto personal, llenándonos de cosas que hacer para el bien de uno mismo; o por otro lado es tal la necesidad del consumismo que nos torna insatisfechos y deseosos por tenerlo todo. La constante información superficial y el sistema de comunicación en donde todo lo podemos obtener rápida y virtualmente nos aleja de lo que realmente es importante, en cuanto a las necesidades reales que tiene nuestro prójimo. Ante lo anterior, el Papa nos remite de nuevo a tener presente que el Evangelio es lo que realmente tiene el mensaje adecuado y diferente que nos sana y nos hace felices.
Termina este subtema y a su vez este Capítulo Tercero que hemos meditado con el nombre de A la luz del Maestro diciéndonos cómo la fuerza del testimonio de tantos santos cuyas vidas nos han dejado múltiples enseñanzas con su testimonio; para lo cual les invito nuevamente a leer sus vidas y obras, porque dentro de ellas encontraremos sabias y seguramente sencillas formas de vivir las bienaventuranzas. “…el cristianismo es principalmente para ser practicado, y si es también objeto de reflexión, eso solo es válido cuando nos ayuda a vivir el Evangelio en la vida cotidiana…” (PF – GE No. 109)
“…Recomiendo vivamente
releer con frecuencia estos grandes textos bíblicos, recordarlos, orar con
ellos, intentar hacerlos carne. Nos
harán bien, nos harán genuinamente felices…”
Papa Francisco - Gaudete et
Exsultate No. 109
Afectísima en Jesucristo,
Lilia Garelli
También me puedes seguir en:
diosidencias@gmail.com lilia.garelli@gmail.com
https://twitter.com/antoniogarelli y https://www.facebook.com/tono.garelli
www.demilagrosydiosidencias.blogspot.mx
Solo por el gusto
de proclamar El Evangelio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario